El Monumento que recuerda "La Masacre de Rosario" en calle Junín donde fueron asesinadas once personas, dos civiles y nueve policías, por un explosivo colocado por "Montoneros", fue nuevamente víctima de pintadas realizadas por miembros de esa organización terrorista.
Como todos los años cuando llega marzo estos "jóvenes idealistas" reivindican su artero accionar criminal escudados en una supuesta defensa de derechos humanos, que por supuesto solo valen para sus integrantes.
En esta ocasión las pintadas ponen de manifiesto una vez más su desinterés por las vidas humanas, tratando de desvirtuar la verdadera historia ya que dicho monumento recuerda no sólo a policías sino también a civiles.
En él también están los asesinados durante épocas de gobiernos constitucionales lo cual pone de manifiesto que los terroristas no luchaban contra ninguna dictadura sino para imponer un regimen propio por medio del terror.
La intolerancia de estos grupos sigue teniendo la misma virulencia que en los años pasados, la supuesta justicia transformada en meros actos de venganza muestra sin lugar a dudas que no lleva a nuestra Nación por el camino de la paz y la grandeza sino que nos retrotrae a los años trágicos del país.
No responderemos a las provocaciones insensatas de quienes pretenden reinstaurar un clima de violencia y enfrentamientos entre argentinos.
Lo que nos llena de orgullo y satisfacción es ver que una pequeña pared molesta mucho ante tanto museo de la memoria, lo cual significa que la verdad prevalece sobre las mentiras.
Podrán tener el edificio más grande de la ciudad para llenarlo con sus historias deformadas por el odio pero jamás tendrán siquiera un solo ladrillo que refleje el honor de la sangre derramada en defensa de la Patria.
Como todos los años cuando llega marzo estos "jóvenes idealistas" reivindican su artero accionar criminal escudados en una supuesta defensa de derechos humanos, que por supuesto solo valen para sus integrantes.
En esta ocasión las pintadas ponen de manifiesto una vez más su desinterés por las vidas humanas, tratando de desvirtuar la verdadera historia ya que dicho monumento recuerda no sólo a policías sino también a civiles.
En él también están los asesinados durante épocas de gobiernos constitucionales lo cual pone de manifiesto que los terroristas no luchaban contra ninguna dictadura sino para imponer un regimen propio por medio del terror.
La intolerancia de estos grupos sigue teniendo la misma virulencia que en los años pasados, la supuesta justicia transformada en meros actos de venganza muestra sin lugar a dudas que no lleva a nuestra Nación por el camino de la paz y la grandeza sino que nos retrotrae a los años trágicos del país.
No responderemos a las provocaciones insensatas de quienes pretenden reinstaurar un clima de violencia y enfrentamientos entre argentinos.
Lo que nos llena de orgullo y satisfacción es ver que una pequeña pared molesta mucho ante tanto museo de la memoria, lo cual significa que la verdad prevalece sobre las mentiras.
Podrán tener el edificio más grande de la ciudad para llenarlo con sus historias deformadas por el odio pero jamás tendrán siquiera un solo ladrillo que refleje el honor de la sangre derramada en defensa de la Patria.
Maravillosas Palabras Finales , certera reflexión .
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